_
_
_
_
_

AVA-Asaja cifra en 21,2 millones de euros los daños del fuego al campo

Las llamas han destruido al menos 850 hectáreas de terreno agrícola

Valencia -

AVA-Asaja ha cifrado en 21,2 millones de euros los daños directos causados al sector agropecuario como consecuencia de los incendios que han quemado 50.000 hectáreas en la Comunidad Valenciana.

Esta cifra sale de una primera valoración efectuada por los servicios técnicos de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja). De los 50.000 hectáreas quemadas, principalmente en las áreas colindantes a poblaciones como Andilla, Cortes de Pallás o Alcublas, al menos 850 hectáreas corresponden a terrenos de uso agrícola que se han visto afectados en mayor o menor grado y donde el valor de las pérdidas asciende a 12,7 millones de euros.

A esta cantidad hay que sumar otros 3,5 millones correspondientes a los daños ocasionados en la ganadería -asentamientos de colmenas en los montes y destrucción de pastos, fundamentalmente-, así como otros cinco millones de euros atribuibles a los considerables desperfectos originados por el fuego en infraestructuras agrarias, sobre todo en instalaciones de riego y en algunas granjas. Por tanto, la cifra final de los daños causados por los incendios en el sector agropecuario se sitúa en 21,2 millones de euros.

El presidente de AVA-Asaja, Cristóbal Aguado, tras lamentar la pérdida de una vida humana y los daños de todo tipo ocasionados por el fuego, ha comentado que la valoración económica que se ha efectuado es "moderada", ya que la cuantía de los desperfectos será "probablemente mucho mayor", máxime si se toma en consideración que va a costar "mucho tiempo" recuperar las áreas afectadas.

Además, en la estimación no se incluye el valor de los "muchos miles" de hectáreas de bosque destruidas, las cuales son en un porcentaje "muy elevado" propiedad de particulares. Desde la organización agraria consideran que solo la repoblación de toda la masa forestal que se destruido tendría un coste "superior 120 millones de euros". En cualquier caso, los agricultores y ganaderos de estas zonas, "ya de por sí suficientemente desfavorecidas y depauperadas, han sufrido también un golpe muy duro".

Ante la situación creada, el máximo responsable de esta organización agraria ha reclamado a las distintas Administraciones, incluida la Unión Europea, que valoren adecuadamente "la magnitud del desastre y pongan en marcha un plan especial de ayudas que contribuya, siquiera en parte, a aliviar a los afectados". Desde AVA se ha solicitado, además, la aprobación de medidas fiscales y de ayudas para el pastoreo y la limpieza de montes.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Precisamente, Cristóbal Aguado, ha asegurado que la rapidez con la que se han extendidos los siniestros "está motivada en parte y se ha visto favorecida en gran medida por la proliferación de explotaciones agrarias abandonadas como consecuencia de la falta de rentabilidad de los cultivos". Los huertos cultivados han actuado siempre como un eficaz cortafuego, pero si están abandonados se convierten, por el contrario, en una "rápida correa de transmisión de cualquier incendio".

Aguado ha destacado que "esto es algo que tienen que tener muy claro los políticos a la hora de legislar y valorar el papel medioambiental que también desempeña la agricultura". Los cultivos que se han visto más afectados por estos últimos siniestros son almendros, algarrobos, olivos, viñas y, ya en menor medida, cítricos, frutales, caqui y plantas ornamentales.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_